Soy Noelia Arri, economista y emprendedora, especializada en creación de empresas e innovación en modelos de negocios utilizando metodologías ágiles como desarrollo de clientes y lean startup. A través de entrenamientos y mentorías ayudo a los emprendedores a crear un emprendimiento exitoso que les genere riqueza y prestigio haciendo lo que les apasiona y aporta valor a la comunidad.
Te cuento como llegué hasta aquí. Pocos meses después de finalizar la licenciatura en economía decidí pedir una beca para comenzar un doctorado en economía. Analizando mis posibilidades en ese momento, pensé que era lo mejor para mí. Siempre me gustó el trabajo intelectual y se me daba muy bien investigar y escribir. Sumado a que no quería mudarme a una gran ciudad como Buenos Aires (soy de Río Cuarto provincia de Córdoba) para trabajar en una multinacional.
Si bien me entusiasmaba la idea de una carrera académica, en el fondo sabía que me iba a terminar aburriendo. Soy muy inquieta, cuando siento que algo no me hace crecer como persona o profesional cambio de lugar. Y así fue. ¿Qué estaba haciendo ahí? ¿Era ese mi propósito? No sentía que mis artículos académicos ni exposiciones en congresos realmente cambiaran una realidad.
Entonces empecé a trabajar en una consultora asesorando a empresas familiares. Meterme en el corazón de las empresas despertó en mí una gran admiración por los emprendedores y empresarios. Y decidí que quería ser como ellos. Tener una visión, aportar valor a la comunidad, resolver un problema y trabajar apasionadamente con un propósito. Al poco tiempo ya era dueña de mi propio negocio, un almacén de alimentos orgánicos, el primero de mi ciudad.
Creo que no hace falta decirte que no estaba a la altura de las circunstancias. Saltar del mundo académico al mundo empresarial fue saltar al abismo. Cometí muchísimos errores, pero el que más me reprocho fue no haberme preparado para ese desafío.
Pero nunca es tarde. Mi memoria académica me decía que tenía que haber un método para emprender que ayudara a reducir el riesgo de fracaso. Empecé a investigar por qué fracasan los emprendimientos y qué métodos su usaban en los principales ecosistemas del mundo para aumentar las posibilidades de éxito. Me llevó años seleccionar y estudiar los libros de referentes en estos temas. Hasta que encontré el método y las herramientas que estaba buscando.
No sólo empecé a poner en práctica estos conocimientos en mi propio emprendimiento, también comencé a ayudar a otros emprendedores a diseñar y validar su idea de negocio. Ver sus caras de epifanía, seguros de lo que hay que hacer y cómo hacerlo, me generaba un gran entusiasmo y satisfacción. Por fin sentía que estaba aportando valor. Por fin encontré mi propósito, mi pasión.
Ayudar a otros emprendedores a concretar su sueño ¡Así nace Lidsoy!